Arlette Farge
Efusión y tormento. El relato de los cuerpos
Historia del pueblo en el siglo XVIII
notas de prensa
Efusión y tormento. El relato de los cuerpos
SP. Revista de Libros - México, 3/1/2010
La nueva historia cotidiana
ABC - España, 4/19/2009
Los miserables
Página/12 - Radar - Argentina, 4/12/2009
Efusión y tormento. El relato de los cuerpos
El País - Babelia - España, 1/17/2009
Efusión y tormento. El relato de los cuerpos
El Arca del Nuevo Siglo - Argentina, 12/1/2008
Ofensiva y defensiva del cuerpo
El Nacional - Papel Literario - Venezuela, 10/11/2008
El pálpito de los documentos
El Día de Córdoba - España, 9/30/2008
Efusión y tormento
Crítica - Argentina, 9/8/2008
El otro Siglo XVIII: Gramática corporal
ABC - ABCD las Artes y las Letras - España, 8/23/2008
La historia en el cuerpo
La Nación - ADN - Argentina, 8/23/2008
Efusión y tormento. El relato de los cuerpos
El Arca del Nuevo Siglo - Argentina, 7/17/2008
Efusión y tormento
Debate - Argentina, 7/12/2008
El relato de los cuerpos
Clarín - Revista Ñ - Argentina, 6/21/2008
título de la nota: Efusión y tormento. El relato de los cuerpos
autor de la nota:
medio: SP. Revista de Libros - México
fecha: 3/1/2010
extracto
Arlette Farge relata en este breve texto una síntesis de su investigación titulado Efusión y tormento. El relato de los cuerpos, editado por Katz Editores. A través de una minuciosa búsqueda en archivos que recogen los casos judiciales de delitos minúsculos durante el Siglo de las Luces en Francia, la brillante historiadora entreteje la vida cotidiana de las clases desposeídas, su forma de pensar y de comprender el mundo y el papel que jugaba el cuerpo en este entramado. En palabras de Farge, "Luego de haber trabajado sobre la vida familiar, la violencia, las relaciones entre los sexos, los niños, las mujeres y la opinión pública, me pareció que los pobres tenían como único bien su cuerpo, su fuerza, su emotividad y su inteligencia".
título de la nota: La nueva historia cotidiana
autor de la nota: Ricardo García Cárcel
medio: ABC - España
fecha: 4/19/2009
extracto
A Farge le interesa especialmente el mundo de las clases desheredadas, de los niños abandonados, de problemas de subsistencia, de vida atormentada en la Francia del siglo XVIII. Y su estudio lo centra en la nueva historia sensorial a la que me refería anteriormente, historia de cuerpos marcados y maltratados, de gestos efusivos, de expresiones orales, de emociones táctiles, de desparrame visceral en forma de conflictos de barrio, de explosiones sentimentales, de miedo a la muerte, pero también miedo a la propia vida.
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Todo un ramillete de fuentes que permiten al lector asomarse al dramatismo testimonial de violaciones, suicidios, incestos, desgarros vitales, violencia salvaje, conjugada con fugaces expresiones de sentido lúdico y festivo de la vida. Como en el famoso libro de Deleito Piñuela sobre la mala vida en la España de Felipe IV, aquí podría hablarse de la mala vida de la Francia del siglo XVIII. Con la particularidad de que lo que en Deleito aparentaba ser marginal o pintoresco, aquí adquiere relieve de centralidad histórica.
título de la nota: Los miserables
autor de la nota: Mariana Enriquez
medio: Página/12 - Radar - Argentina
fecha: 4/12/2009
extracto
La historiadora Arlette Farge abordó el Siglo de las Luces desde la perspectiva del campo popular. Las pasiones, alegrías y penurias de un pueblo que empezó a ser objeto del control social se expresan en testimonios tan insólitos como originales.
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El contenido de las fuentes de Farge es apasionante.
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Para Farge -dueña de un estilo en ocasiones cercano al lirismo, pero siempre claro y reposado- las emociones y las pasiones deben tomarse en serio e inscribirse en el campo histórico: es allí, explica, en esa emoción que constituye la escritura del cuerpo, que el pueblo hace política y resiste.
título de la nota: Efusión y tormento. El relato de los cuerpos
autor de la nota: José Luis Pardo
medio: El País - Babelia - España
fecha: 1/17/2009
extracto
En este texto, y gracias a las crónicas de diversos observadores de la vida cotidiana en París, Farge escenifica la vida de unos cuerpos de los cuales todo el mundo habla pero que, por estar ellos mismos privados de palabra, aparecen a menudo como un sonido, un ruido atronador, una risa violenta o un miedo espeluznante que habita un espacio que se disputan los diversos poderes (la policía, la medicina, la fábrica, el comercio) y en el cual subsisten las sordas alegrías y tristezas de los trabajadores precarios, las mujeres humilladas, los niños abandonados o los mendigos. Los caminos de quienes tienen el deber de mantener un orden público no siempre defendible, y los de quienes por fuerza lo desarticulan -el pobre, el loco, el marginal-, se cruzan en escaramuzas constantes.
título de la nota: Efusión y tormento. El relato de los cuerpos
autor de la nota: Federico Ríos
medio: El Arca del Nuevo Siglo - Argentina
fecha: 12/1/2008
extracto
Ya el punto de partida y la visión histórica que tutelan estas páginas son muy originales; más aún: fascinantes.
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Este libro restituye la parte sensible de esos cuerpos que hablan, y sobre los que están inscritas la historia y la política de su época.
título de la nota: Ofensiva y defensiva del cuerpo
autor de la nota: Nelson Rivera
medio: El Nacional - Papel Literario - Venezuela
fecha: 10/11/2008
extracto
La comprensión de lo humano no sería posible sin la aproximación a la abrumadora elocuencia de lo afectivo. Hay algo más en todo esto: las conductas del poder frente a la realidad y potencia de las emociones. Farge se pregunta por qué la autoridad quiere contenerlas o impedirlas. Su objeto central es el cuerpo, el vehículo del ser en el mundo, la entidad sede de percepciones, sensaciones y sentimientos, es decir, una categoría de lo político y lo histórico.
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La autora ha escrito un texto corporal, que late y sufre contracciones, que inhala y exhala, que se extiende y contrae, que se alimenta de sus propios recuerdos y que basado en sus propias energías, toma impulso para avanzar y conquistar nuevos territorios.
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Son cuerpos los que suenan, los que escuchan, los que se desplazan, se encuentran, se abrazan, se combaten, se reúnen, celebran o se convierten en la temida turba que la policía está en la obligación de dispersar y reprimir si es necesario. "Los vecinos no constituyen una masa inmóvil. Van y vienen en el espacio parisino y sus alrededores, viven sin tranquilidad ni estabilidad en busca de trabajo y conocen una promiscuidad tenaz que los hace vivir constantemente sin intimidad, en el espacio público, bajo la mirada de todos."
título de la nota: El pálpito de los documentos
autor de la nota:
medio: El Día de Córdoba - España
fecha: 9/30/2008
extracto
No es raro que el miedo congénito de la Ilustración al desorden y la expresión del instinto natural se topase con el cuerpo como elemento incómodo e indescifrable. Los relatos y testimonios recogidos en este libro, extraídos de los archivos nacionales franceses, enuncian esta tensión entre el pálpito de los cuerpos y la gramática de las prácticas jurídicas y policiales que ordenaron la norma moral y el discurso científico.
título de la nota: Efusión y tormento
autor de la nota: Hernán Brienza
medio: Crítica - Argentina
fecha: 9/8/2008
extracto
Si bien es cierto que hace poco [...] la historia social tomó como objeto de estudio a los sectores populares o periféricos, la originalidad de este libro se halla más allá de esa novedad relativa: en el enfoque y en la minuciosidad de la investigación. Efusión y tormento. El relato de los cuerpos. Historia del pueblo en el siglo XVIII estudia el pasado de las clases subalternas a través de la dimensión corporal.
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Original, inspirador, sensible, este libro descubre aspectos ocultos de ese siglo de los filósofos, alumbrando la vida y la muerte -con su carga de festividad narcótica y de dolor tortuoso- de los desconocidos que sostienen la historia a pulmón. Escrito con plasticidad y elegancia estilística, Efusión y tormento es un de los textos de sociología más deliciosos de los últimos tiempos.
título de la nota: El otro Siglo XVIII: Gramática corporal
autor de la nota: Juan Malpartida
medio: ABC - ABCD las Artes y las Letras - España
fecha: 8/23/2008
extracto
Que el siglo XVIII francés, llamado de las luces, no fue todo claridad, es algo que se sabe casi desde sus días, pues siempre tuvo detractores, monárquicos tradicionalistas, reaccionarios o escépticos. Pero sólo un pensamiento filosófico e historiográfico educado en la segunda mitad del XX nos podía mostrar las complejidades de ese gran siglo. La historiadora francesa Arlette Farge ha dedicado varias obras al estudio del siglo de la Ilustración, pero no a las proezas de sus grandes eruditos, filósofos y moralistas sino a la gente de la calle, locos, niños secuestrados o abandonados, mujeres de las clases bajas y trabajadores; en definitiva, ha investigado y pensado sobre el mundo menos ilustrado, desprovisto generalmente de escritura pero no de palabras y de cuerpos.
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Leer esa piel marcada por cicatrices, voces entrecortadas y líneas con faltas de ortografía es lo que ha realizado Farge en este libro. Aunque su tema sea lejano en el tiempo no deja de ofrecernos un espejo crítico, pues quizás hemos olvidado -apunta Farge- el entusiasmo y el fervor en relación a los otros como sentimientos tan lúcidos y necesarios como la libertad.
título de la nota: La historia en el cuerpo
autor de la nota: Raquel San Martín
medio: La Nación - ADN - Argentina
fecha: 8/23/2008
extracto
El ejercicio científico de la historia está emparentado con la ficción. Sobre todo cuando su fin es reconstruir el clima cultural de una época y llamar la atención acerca de la vida cotidiana de las personas olvidadas o estereotipadas por el relato histórico más difundido. Esa reconstrucción con base científica y recursos ficcionales ofrece Arlette Farge en Efusión y tormento.
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Especializada en historia del Derecho y del siglo XVIII, Farge se sumerge en actas de denuncias e interrogatorios policiales, archivos sobre el abandono de niños, informes de oficiales de policía que cuidan paseos públicos y cronistas de la época. Con esos documentos construye un asombroso fresco sobre el lado más oscurecido del Siglo de las Luces.
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Hay pasajes particularmente impactantes. Por ejemplo, las páginas que describen el problema de los niños abandonados, que se multiplican de a miles en París; las redes informales y deficientes de asistencia, y las señales que dejan los padres en la ropa de los recién nacidos con la esperanza de recuperarlos.
título de la nota: Efusión y tormento. El relato de los cuerpos
autor de la nota: Jorge Ariel Madrazo
medio: El Arca del Nuevo Siglo - Argentina
fecha: 7/17/2008
extracto
Ya el punto de partida y la visión histórica que tutela estas páginas son muy originales; más aún: fascinantes.
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Farge tanto puede glosar las minuciosas observaciones de un célebre peregrino, Caillotins, como las actas sobre la recolección de cadáveres hallados en el Sena o en los caminos. También, los restos de papeles y de certificados que los náufragos o víctimas en las rutas llevaban consigo, así como las rogativas puestas por los padres entre las ropas de los niños abandonados ante un hospital de caridad.
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Este libro notable restituye la parte sensible de esos cuerpos que hablan, y sobre los que están inscritas la historia y la política de su época.
título de la nota: Efusión y tormento
autor de la nota:
medio: Debate - Argentina
fecha: 7/12/2008
extracto
El siglo XVIII, el llamado Siglo de las Luces, además de ser una época marcada por el fabuloso desarrollo del pensamiento y de las artes, también fue un período donde el control social sobre la población se volvió más eficaz y sofisticado. Sobre la base de los extraordinarios archivos judiciales y policiales franceses, Farge reconstruye la manera en que vivían los sectores populares y, sobre todo, la relación histórica de los hombres con sus cuerpos, como una forma de resistencia vital a la opresión estatal.
título de la nota: El relato de los cuerpos
autor de la nota: Ivana Costa
medio: Clarín - Revista Ñ - Argentina
fecha: 6/21/2008
extracto
Una investigación en los archivos policiales de la Francia del siglo XVIII permite entender cómo las clases populares, en su mayoría gente analfabeta, utilizaba el cuerpo para expresar múltiples significados.
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